“el ser bombero es un trabajo muy
duro y respetable por que no cualquiera salva vidas arriesgando su
propia vida. “
Esta
historia comienza prácticamente dos meses antes, donde me puse a trabajar de lo
que pudiera, seguridad de eventos, realización de proyectos, y ahorrar lo mucho
o lo poco de mis quincenas, hacer un préstamo, y todo lo que pudiera conseguir
para tener dinero, para mi hotel, comidas, transportación para ir a Playa del
Carmen a la Academia de Bomberos. Fue un comenzar duro y complicado, no solo
implicaba juntar mi dinero, sino como lograr obtener un equipo de bombero, mi
inscripción todavía no había sido concretado, porque no creían que una persona
que estudio licenciatura en derecho, iba
tomar un curso de Operaciones tácticas de bomberos, pero bueno sin embargo la
inscripción se dio por la Academia de Bomberos de Playa del Carmen, y el equipo
también fue un duro reto conseguirlo, sin embargo hay amigos que valen la pena
y creen en los sueños que tú tienes, y me presto uno de los suyos, las botas me
quedaban grandes eran pesadas y por qué no eran de mi medida, eran tipo para
aeropuerto, no tenían guantes, mi casco fue reciclado de dos, sin embargo era
muy funcional y era justo para mí.
Y
empezó el reto, entrenar diario todas las tardes, correr, trotar, caminar, y
hacer ejercicio una hora a dos horas, pero lo difícil es comenzar con el equipo
de bombero , un equipo que pesa aproximadamente 15 kilos, mantenerlo más de dos
horas con el subir, caminar con él fue difícil, que el primer día me costó un
golpe de calor, y deshidratarme por completo, pero no lo deje por una semana
para acostumbrarme, y tenía mucha confianza que podía lograr mantenerme con él.
El día
esperado llego, viaje sola conseguí que una familia me acogiera para no tener
muchos gastos, siendo que no sabía lo que me esperaba. llegue un día antes para
adaptarme; era curioso bajarme con dos maletas y un casco de bombero, mucha de
la gente no está acostumbrada a ver que una mujer cargue con estos implementos.
Al día siguiente llegue temprano a la academia y fui bien recibida, sin embargo
el primer desplante se hizo notar por los compañeros
bomberos del dirección de siniestros de la secretaria de seguridad pública de
aquí de yucatan, pero no me importo, me sume al grupo de bomberos, protección
civil, cruz roja mexicana de los estados de Comacalco, isla mujeres, Cozumel, Lázaro
Cárdenas, Bacalar, etc. Pero fue complicado, mi nombre no estuvo en el
registro, con paciencia espere para que me dieran acceso, todos iban en grupo, o equipo, fue muy difícil estar sola, pero nunca me desvié de mi objetivo; logre
reunirme con el equipo que tomaría el curso de operaciones tácticas de bomberos, 40 hombres y yo UNA MUJER. El instructor no lo podía creer,
era un capitán de bomberos de Tijuana, pero el jamás me hizo ningún desplante o
ningún desprecio al contrario me trato igual que todos los bomberos. ME DIO MI
LUGAR.
Ya con el
equipo de bombero empezaron las practicas, me daba miedo, no puedo mentir, me dio
miedo bajar de una escalera, por que jamas en la vida había subido con 15 kilos
como guardarropa, hacer maniobras, escuchar el grito de mi instructor diciendo
ORALE MI BOMBERA NO SE ME RAJE!!, ese fue inimaginable, hacer lo mismo que hacían
los demás bomberos era un reto, levantarse desde las cinco de la mañana para
correr en la Quinta Avenida, hacer ejercicios en la Playa, era dolor en las
noches, cansancio, pero mucha adrenalina.
El reto no
solo era mío, si no fue para ellos aprender a convivir con una mujer, y más ser
parte de su equipo, no fue siempre las cosas muy fáciles, me rasgue uno de mis
tendones de mi pantorrilla pero no me queje, llore sí, pero sin que lo viera
nadie, porque tenía miedo a fracasar, a no cumplir con lo que me decía el
instructor. Les puedo decir que hubo un momento cuando un instructor dijo QUE
NO DEBE HA VER MUJERES EN LAS BRIGADAS DE ATENCION A EMERGENCIAS QUIMICAS, que sentí
que estaba equivocado, pero cuando hice el ejercicio, demostré que las mujeres
podemos, no necesariamente ponernos el traje de descontaminación pero nunca
NADIE PUEDE DEJAR A UNA MUJER AFUERA, después de tres días, ya era parte del
equipo de bomberos, se acostumbraron a mi persona.
Al final mi
equipo no paso la prueba, tuvimos que hacerla tres veces, yo opte que los que
eran bomberos pudieran aplicar sus conocimientos, pero no falto uno que otro
que traía la SOBERBIA SOBRE SU CABEZA que no quería hacer equipo,
lamentablemente era de bomberos Yucatán, a pesar de todo se logró hacer el
ejercicio, yo tuve la oportunidad de dar lo poco que se, manejar mangueras, dar
línea, y hacer lo que me correspondía en una emergencia.
Termino el
curso, pase a recibir mi reconocimiento en nombre de mi dependencia Protección
Civil representando al Estado de Yucatán,
fue un orgullo y para mí fue una promesa que le hice a mi padre antes de morir.
Hoy puedo decir
que las mujeres podemos, simplemente no puedo decir que es fácil, sin embargo
con empeño, capacitación, las mujeres pueden formar parte de los Equipos de Bomberos.
Esta es una
promesa a mi padre antes de morir, En el susurrar
de mi voz le dije gracias padre por hacer que yo sea diferente, por permitirme
darme el valor de vivir con fortaleza, por enseñarme que lejos de los golpes se
vive mejor, y por qué cada vez que bajabas la cabeza por un maltrato, aprendi
que no iba a permitir que nadie hiciera lo mismo conmigo.
** a mis amigos.....todos.....
#niungolpemas #porlosderechosdelamujer
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